Santiago Martín Sánchez
(Vitigudino, Salamanca, 1938)
Toreador
“EL VITI”
Aprendió con becerros de la ganadería
de don Manuel Francisco Garzón, unos novillos
duros, de los que te enseñan con su trapío
para poder dominar el arte de la lidia.
Uno de ellos le rompió el brazo un día
mientras lo capeaba en Carabanchel. Hizo
esta lesión que torease de modo distinto
porque el defecto de la extensión lo tenía
que disimular con el juego de la muñeca.
Logra doctorarse en la Feria de San Isidro
con Gregorio Sánchez como padrino y Diego
“Valor” de testigo abriéndosele la Puerta
Grande. Fue un primer espada con gran dominio
de la muleta y un temple solemne y serio.
(Poema escrito por Andrés González Déniz)